Trainspotting, la icónica sesión de fotos de Lorenzo Agius

En una entrevista con The Week, el fotógrafo Lorenzo Agius cuenta la historia de sus imágenes para la campaña original de la legendaria película «Trainspotting». «La gente que la hizo no sabía cómo comercializarla. Querían evitar dar glamour a las drogas y aún estaban pensando cómo hacer la campaña. Me ofrecieron hacer la fotografía y me dieron casi total libertad para aportar ideas», explica Agius.

Rodaron en pleno verano de 1995, en uno de los días más calurosos del año. Los actores llevaban toda la noche rodando, estaban agotados y se sentían muy mal. En cierto modo, eso contribuyó a lo que Agius quería de ellos. «Comprendieron el ambiente que quería crear, capturando la personalidad de los personajes de la película pero llevándola al extremo, quería captar la oscuridad, la crueldad y la rudeza», añade.

Robert Carlyle, que interpretaba a Begbie, era un glasgowiano muy duro, que había tenido una vida difícil y todo era una batalla para él. Había desarrollado ese personaje hasta tal punto que rodarlo en el estudio daba bastante miedo. Se mostró agresivo y violento, y se mantuvo en su personaje.

En cuanto a la transcendencia que tuvieron las imágenes explica que cuando hizo la sesión no se imaginaba el impacto cultural que tendrían, «sólo haces el trabajo con tu mejor capacidad creativa y tus conocimientos», comenta Agius. El hecho de que las imágenes se convirtieran en algo tan influyente fue fruto de la casualidad, y se debió a que muchos elementos diferentes confluyeron al mismo tiempo. Explica que estos elementos fueron una «gran escritura, dirección e interpretación, junto con esa banda sonora increíble y una campaña de carteles poderosa y única».

Poster promocional para Trainspotting, 1996

Casi 20 años después, las imágenes que se tomaron ese día siguen transmitiendo la misma fuerza e impacto. Se han convertido en un símbolo de una generación perdida, que desconfiaba de la propuesta tradicional de la vida adulta. Mostraban una realidad que no se quería mostrar, pero que existía, y existe. Por eso cada generación de adolescentes desde entonces, ha tenido el poster con las fotos de Lorenzo Agius y las letras naranjas que decían «Choose Life». Lo que se pensó como una simple campaña promocional, transcendió a la imagen de toda una generación.