A veces cuando queremos dejar de lado una etapa muy importante de nuestra vida necesitamos liberar todo lo que hemos y seguimos sintiendo. Algunos lo hacen mediante una carta que se escriben a sí mismos, otros prefieren los mensajes de WhatsApp. Dende prefirió crear ‘95 Civic, un desahogo sentimental tras una ruptura amorosa que en sus propias palabras “le dejó un vacío que aunque pasara el tiempo no podía suplir”.
El cantante de Texas ha logrado una cohesión digna de artistas de clase mundial y sin dejar de lado la diversidad, tanto musical como lirical. No hay ninguna emoción que se pueda sentir después de una separación que se haya quedado fuera de las letras del disco: el remordimiento, la nostalgia, la culpa, el deseo de reunión, la incredulidad hacia tus propios comportamientos e incluso el deseo de que a la otra persona le vaya bien se incluyen en el proyecto.
Estos temas casan perfectamente con el estilo de composición, con la voz de Dende y de sus colaboradores y con el género musical, un R&B que ondea entre el clásico y el moderno tomando elementos de otros géneros como el soul o el rap y representando perfectamente esta nueva era del artista y su evolución respecto a sus anteriores álbumes. Sinceramente de los proyectos de R&B de este año siento que es el mejor, y no precisamente por su complejidad si no por lo placentero de escuchar que es.
Personalmente desde que lo descubrí fue amor a primera vista. Las canciones son pegadizas y consiguen que te identifiques con ellas a pesar de ser una historia tan personal, creando a veces la sensación de que están hechas para ti y estrechando la relación entre el artista y el oyente como me pasó a mi. El imaginario también es algo que me enamoró desde un principio, quizás porque mi primer acercamiento con el disco fue mediante el videoclip de Swerve. La relación que consigue entre los coches y el amor fue algo que me gustó y que aún creció más dentro de mí con el único interludio del álbum, “I Can´t Believe I Call This Woman At Work”, del que dejo una cita para finalizar.
“El amor es como un coche y siento que solo ahora entiendo cómo manejarlo. Lo he estado haciendo durante años pero solo ahora he aprendido a cómo hacerlo correctamente, y justamente a tiempo para mi intento de indagar más a fondo en lo que es el amor»