Sonidos de punk-rock, sintetizadores con tonos oscuros y la potente y singular voz de un canadiense fueron suficiente para que Abel Tesfaye, mejor conocido como The Weeknd, crease «Trilogy», uno de los discos más revolucionarios en el R&B de la época.
Cruz Cafuné decía un 10 de enero en su tema contenido en “Moonlight922” llamado “Doble Tick Azul”, junto a Sofi de la Torre, que “todas las carencias que tenemos no se solucionarán con sexo”. Cuando escuché esa pieza de R&B del canario, no pude evitar acordarme del sentimiento que recorría mi cuerpo el día que escuché “Trilogy”, el disco recopilatorio de The Weeknd lanzado el 13 de noviembre de 2012. Tras una semana en la que mi banda sonora eran las guitarras de “Wicked Games”, la tenebrosa atmósfera de “Gone” o el delicado y triste piano de “Echoes Of Silence” y con motivo del 11º aniversario de este largo proyecto, era una necesidad para mí hacer un artículo acerca de este gamechanger en el mundo del R&B.
Después de lanzar tres mixtapes que revolucionarían el R&B que conocemos actualmente, el canadiense Abel Tesfaye, mejor conocido como The Weeknd firmaría en septiembre de 2012 un contrato en el que se uniría a Republic Records en un acuerdo conjunto con el propio sello de The Weeknd, XO Records. Sería un mes más tarde, tras conseguir hacer legal el uso de varios samples a lo largo de las cintas, cuando The Weeknd lanzaría el video oficial de “Rolling Stone”, el cual le serviría para promocionar el lanzamiento de “Trilogy”.
No sería este el único videoclip relacionado con el disco, tanto el 18 de octubre como el 8 de noviembre (una semana antes de la salida del disco), el canadiense lanzaría los videos oficiales de “Wicked Games” y “The Zone” respectivamente, este último contando con la colaboración de Drake. Y sería entonces tras todo este rollout cuando el 13 de noviembre de ese mismo año, “Trilogy” vería la luz.
Como ya hemos dicho antes, “Trilogy” recopila los tres primeros proyectos de The Weeknd, pero con el peculiar detalle de que estos cuentan con una mezcla diferente y con tres temas que se añaden a los nueve existentes en cada una de las mixtapes con el fin de dar una línea argumental a esta obra de dos horas y media de duración. Para entender un poco la línea argumental del mismo, vamos a ir poco a poco a través de este denso pero adictivo proyecto, empezando por “House Of Balloons”.
En este primer proyecto, el artista nos da a conocer a un Abel cuya vida esta basada en el sexo y las drogas a través de un oscuro y misterioso sonido influenciado por el trip-hop, el rock indie y sonidos varios de electrónica, todo esto de la mano de Illangelo y Doc McKinney, manos maestras en otras obras del artista como “Starboy” o “After Hours”. En esta entrevista para Rolling Stone,
Abel explicaba el título de esta tape, que hace referencia al lugar donde fue a parar cuando dejó los estudios a los 17. En esta casa ubicada en el número 65 de la Avenida Spencer, en Toronto, hacían fiestas cutres e invitaban a chicas por lo que “siempre había globos”. A lo largo de la cinta no solo nos describe cómo funcionaba el lugar, movido por las mujeres y las drogas, como sucede en “High For This” o “House Of Ballons/Glass Table Girls”; podemos ver la historia de romance entre Abel y una (o varias, sabiendo como es nuestro amigo) de las chicas que invitan a esta “casa de globos”.
Es un sin fin de emociones las que podemos ver a través de los temas de este tipo: mientras que en “What You Need”, “The Party & The After Party” o “Loft Music”, mi tema favorito de este proyecto, podemos ver a un The Weeknd que parece seguro y dominante en cuanto a mujeres se trata, cosificándolas y dándoles “falso amor” con la finalidad de conseguir sexo, todo ello bajo el efecto de las drogas; es en temas como “The Morning”, “The Knowing” o el famoso tema “Wicked Games”, donde podemos ver que este comportamiento solo sirve como un “escudo” ante la carencia de autoestima y la necesidad de afecto femenino del artista.
El tema de cierre de esta primera etapa, “Twenty Eight”, nos da ese enlace argumental necesario con el siguiente disco. A lo largo del tema podemos ver el apego evitativo que muestra Abel hacia esta chica que, aunque está perdidamente enamorado, siente que no le hará bien, arrepintiéndose de todo lo ocurrido a lo largo de la cinta.
Pasamos entonces a “Thursday”, que comienza con el tema “Lonely Star”, donde The Weeknd nos presenta a un nuevo personaje llamado “estrella solitaria”, una chica a la que solo ve los jueves. Esta chica solo le sirve para llenar su vacío físico, ya que no es capaz de llegar a enamorarse de ella, que está pillada hasta los nervios de Abel. En el siguiente tema, “Life Of The Party”, mientras que esta chica está deseando que llegue el jueves para ver a Abel, este anda por ahí golfeando, persuadiendo a una chica rica que le gusta esnifar cocaína de entrar a su mundo, recordándonos al lobo disfrazado de abuelita en el cuento de Caperucita.
Esta chica del jueves no es consciente de las señales mixtas que le da el canadiense (como podemos ver en “Thursday”) hasta “The Birds pt.1”, donde Abel le advierte que no ha de enamorarse de él o la acabará dejando. En la parte dos de este tema, podemos ver una de las letras más crudas de la carrera del artista. La chica es consciente de que, para él, ella es un juego y, fruto de la rabia, esta dispara a Abel.
En los tres últimos temas del disco, vemos a The Weeknd sumido en el mundo de las drogas como solución a sus problemas, siendo en el último tema donde justifica su abuso de ellas y su comportamiento mujeriego en busca de validación en la ausencia de figura paterna. El tema que se añade en “Trilogy”, “Valerie”, The Weeknd canta acerca de su “lonely star” de la cual, a pesar de todas las infidelidades, parece estar completamente enamorado. Esta canción carente de lenguaje alusivo a las drogas o el sexo sirve como cierre de “Thursday” y como nexo con el siguiente disco, “Echoes Of Silence”.
En este disco, que comienza con una versión del conocido tema de Michael Jackson llamado “Dirty Diana”, The Weeknd nos habla de qué se siente al ser rechazado por la chica que te gusta tan solo porque esta piensa que eres un “don nadie”. En temas como Montreal, al contrario de sus otros discos, podemos ver a Abel Tesfaye hablándonos de como una chica podría haber sido su “estrella solitaria” si se hubiera dado cuenta de lo enamorado que estaba de ella.
A su vez, siguiendo la línea argumental del disco, podemos ver como en “XO/The Host” y el siguiente tema, “Initiation”, The Weeknd empezará a jugar con la chica que en un principio lo rechazó por no ser alguien, mostrándole el estilo de vida al que deberá acogerse si quiere andar con él. En los tres siguientes temas habla de cómo chicas que han pasado o pasan por su vida buscan su atención solo por su fama, no su persona. Esta temática también se repite en Next, donde el artista nos dice que “solo lo quieren porque saben que está en otro nivel”.
Los dos últimos temas los considero un broche de oro para esta obra. Mientras que en “Echoes Of Silence” nos muestra un escenario en el que la chica ruega a The Weeknd que se quede con ella, siendo esto un cierre perfecto al concepto de “estrella solitaria”, es decir, puedes ser brillante en muchos aspectos, pero al final del día estás sola; en “Till Dawn (Here Comes The Sun)” el artista nos muestra las notas más tóxicas de esta relación. Aunque en el tema anterior se muestran totalmente distantes, en el cierre de “Trilogy” Abel le da a entender que existe un vínculo con ella de manera tóxica: aunque no esté contigo no quiero verte con nadie más. Sin duda un cierre al más puro estilo The Weeknd.
Y al más puro estilo de “Las Supernenas” con drogas, sexo y no muchas cosas bonitas, The Weeknd consiguió revolucionar el mundo del R&B con esta obra digna de película de cine. Con “Trilogy”, Abel Tesfaye nos muestra su lado más oscuro y hedonista, marcado por el pecado en sus formas más físicas, el descontrol que conlleva la vida nocturna en los clubes de Montreal y, como dijo C.Tangana en su canción “Un Veneno”, esa obsesión desmedida por las mujeres, la fama y los focos; todo esto con el fin de dar forma a esa sombra misteriosa que nos hacía preguntarnos quién está detrás de la potente y maravillosa voz que, sin saberlo ni suponerlo, marcaría un antes y un después en la historia del R&B moderno.
