En «Jumanji», el famoso filme de 1995, el personaje principal de la misma es guiado al cofre que albergaba el tablero de juego mediante el sonido de tambores tribales. Curiosamente, el protagonista de este episodio sintió algo parecido. La música lo guio hasta el que iba a ser su tablero de juego: una MPC. Y qué casualidad, aunque baile una letra, ambos compartían el mismo nombre: Allan Parrish.
Primero que nada, ¿cómo estás?
Muy bien tío, haciendo el cabra por ahí. Todo bien la verdad.
Día de curro, ¿no?
Sí bueno, los viernes acabo pronto, a las dos. Y nada, la verdad que tenía bastantes cosas pendientes y al final solo me ha dado tiempo a hacer una. Mira ya aprovecho y lo digo por si alguien pregunta, pero tengo discos de “El Periplo” pendientes de enviar. Se me han juntado cosas y se me ha hecho imposible enviarlos.
A mi me llegó hace poco y qué pasada, suena muy guay. La espera merece la pena.
La verdad es que estoy muy contento en cómo quedó. Me pringué en eso y al final ha quedado guay, a la gente le ha gustado.
Totalmente, ha sido currazo. Bueno, primera pregunta: ¿cómo se dio lo de empezar a producir?
En mi casa siempre ha habido mucha música y eso supongo que contribuyó a que yo fuera curioso sobre cómo se hacía y demás. Además, mi primo Truman me metió bastante en la movida del hip hop. Él hacía beats en una MPC 2000 XL creo que era, ahora no me acuerdo, pero ahí es cuando empecé a hacer mis primeras historias y demás. Ahí ya dije “buah, yo quiero empezar a hacer beats”. Me acuerdo de que empecé con el Fruity Loops a hacer loops, que curiosamente es como he acabado, haciendo loops igual (risas). De ahí ya me pillé una MPC y empecé a hacer cosas.
Lo de la música en tu casa me parece curioso. Si no me equivoco, en una entrevista junto a Padri decías que tu padre es un melómano y eso te había hecho escuchar mucha música desde pequeño. Además, hay cosas chulas que dices en ese episodio como lo de que algún día a tu abuela tu música le pueda parecer guay. ¿Lo sigues manteniendo? ¿Crees que lo has conseguido?
Lo mantengo (risas). No creo que se haya cumplido, pero lo mantengo. Lo que quiero decir es que me parece guay hacer de este género musical una cosa menos restrictiva al oído, sobre todo en cuanto a temáticas o sonidos. De alguna manera quiero pensar que lo estamos consiguiendo. Por ejemplo, algunas cosas que hemos hecho con Nico, que alguien incluso podría considerar muy cercanas a la literatura, la forma de relatar las cosas, de empaquetar los discos… Creo que estamos acercando posiciones y que hacemos que se un poco más accesible la música a la gente mayor. Yo tengo ya 31 años y no tengo ganas de fingir que me quiero hacer el malo, que la vida es una mierda y tal. Creo que este tipo de música puede ser el vehículo para contar otro tipo de cosas y acercarse a otro tipo de público. El objetivo final sería que mi abuela acabara escuchando algo y dijera “ojo”. Le he puesto cosas a mis dos abuelas y algún tema les ha hecho gracia, pero bueno, aún queda un poco.
Aparte de inspirarte tu padre, ¿quién te inspira para hacer música?
Ahora mismo mis dos productores favoritos son EVILGIANE y BNYX. EVILGIANE es este productor de Surf Gang que hace un rollo así drill… Es el que produjo “The Hillbillies” de Kendrick y Baby Keem. Había oído hablar de él, pero a partir de ese tema investigué un poco y encontré a la Surf Gang y tal. Luego BNYX me gusta mucho ahora porque es un sonido muy duro pero el tío tiene elementos característicos que, enseguida que oyes un beat suyo, sabes que es de él. Eso me gusta mucho, que los beats tengan cosas características. Aun así, de toda la vida he convivido con influencias variadas. Me ha gustado mucho el rap de los noventa y he tenido mi época de escuchar DJ Premier, Havoc, Pete Rock y tal; y luego también he tenido mi época más del sur, cosas de Atlanta, con el sonido de 808 Mafia, los inicios de Metro Boomin… Siempre he ido a la par con los dos rollos. También he tenido mi época de ser un loco de J Dilla y demás. Aun así, ahora mismo dentro del hip hop, los que más me vuelven locos son esos dos.
«He pasado por todas las etapas por las que una persona que hace música como yo puede pasar.»
Allan Parrish sobre sus influencias musicales.
Fotografía por @andrea_savall
¿Fuera del hip hop quien te inspira?
Pues, aunque hace muchas cosas con gente del hip hop, Jame Blake me parece un tío bastante guay. Además, me gusta porque cuando hace hip hop aporta cosas muy distintas. Por ejemplo, el beat de “LOST FOREVER” para el disco de Travis es un approach muy interesante a ese tipo de ritmos. Hay mucha gente, pero el que se me viene a la cabeza ahora mismo es ese.
Bueno, ya que has hablado de cosas características, ¿qué hace que tu música sea tu música?
Es buena pregunta porque es algo que ni yo se. Eso es una cosa que me gustaría que me dijera la gente a veces. Yo creo que una cosa que me caracteriza mucho es el uso de samples. Yo siempre he sido muy sample based, me gusta mucho samplear. Aunque también compongo y hago mis pinitos, samplear es lo que más me gusta y lo que mejor se me da. Creo que lo más característico mío es la selección de samples, pero aun así creo que sería más fácil que me lo dijeran desde el otro lado. Ahora estoy haciendo rollos muy distintos y no sé si eso hace que pierda un poco la identidad como productor, pero creo que lo que me caracteriza en cualquier forma de hacer beats es los samples que uso.
Totalmente. El otro día volví a escuchar tanto “S.O.D.A.” como “Expectedly Unexpected” y es muy cierto lo que has dicho. Tanto el aura que creas con los beats como los samples hacen que sea muy chulo. Muy misterioso.
Nunca había pensado lo del tema del aura, puede ser. Pero sí, en la selección de samples, sobre todo en “S.O.D.A.”, tuvimos mucho cuidado, lo hicimos a fuego lento. En el de Johnny fue más rápido e improvisado, aunque no fue coger cualquier sample y funcionar. Es muy raro que coja un sample y diga “esto me vale”. Detrás del proceso de selección del sample hay un proceso de reflexión.
Bueno, ahora te voy a hacer dos preguntas las cuales han sido hechas por dos productores. La primera viene de parte de Nico, que me dijo que con esta pregunta te ibas a picar. ¿Por qué usas el Fruity MPC?
Sabía que me iba a decir eso (risas). Lo sigo usando aún. El Fruity MPC es, dentro del Fruity Loops, un layout tipo MPC donde puedes cargar sonidos que se mapean a teclas del ordenador. Yo lo uso y creo que no he visto a nadie usarlo. Creo que soy el único pringado que lo usa. Pero es porque gran parte de mi periodo de aprendizaje fue con un MPC, y hubo un día que me cansé de montar beats ahí y me pasé a Fruity Loops. Necesitaba algo familiar y di con el Fruity MPC, empecé a trabajar con él y no he dejado de usarlo. Es verdad que es un poco limitante y hay otras formas de hacerlo, pero es donde más cómodo estoy. Lo que le molesta a Nico es que, si uso eso y tengo que pitchear para arriba o para abajo el sample, uso el Gross Beat, que cuando tocas el pitch queda horroroso. Al principio no me daba cuenta, pero gracias a sus tirones de orejas me di cuenta de que eso sonaba como el orto. Estoy dejando de pitchear con eso, pero sigo usando el Fruity MPC. La respuesta a su pregunta es que me siento como en casa, aunque no sea lo mejor, es lo más familiar y cómodo para mí. Seguramente tendrá que venir otro Nico enfadado a decirme que no lo use para plantearme dejar de usarlo, pero de momento lo voy a usar (risas).
La siguiente la formula Jay Cas. Hay una cosa que me gusta y es que, en España, tú eres de los pocos que hacen drumless. Hablando con Jay Cas, la pregunta que me dijo que te hiciera es si, cuando usas un sample, le metes drums o si usas en el tema los drums nativos del mismo.
Pues no hay una respuesta correcta a eso. El caso es que, al final toda esta movida que llaman drumless al final no es del todo drumless. Muchos de los samples que usan los productores tienen elementos de precusión ligeritos. Antiguamente a todos lo beatmakers nos ha pasado que, cuando encontrabas un loop, si tenía drums, generalmente no se loopeaba porque te sentías más y sentías que tenías que aportar algo encima del sample. Sentías que tenías que hacer tú los drums encima porque si no parecía que no habías hecho nada. A raíz de que la gente empezara a hacer loops de cualquier manera, incluso sin drums, las reglas cambiaron y la gente comenzó a utilizar cualquier sample, que no hay unas reglas establecidas para usarlos. Entonces yo pues depende, a veces encuentro un sample sin drums y me parece que funciona bien así, tal cual; otras veces creo que con una ligera percusión basta e incluso a veces siento que le necesita unos drums fuertes, es un poco igual. También te digo, estoy dejando un poco el drumless. Ahora si me encuentro un sample le pongo drums.
Claro, ahora lo que haces es samplear “Mi Gran Noche” y mandarle un beat a Gloosito.
Tal cual, tal cual (risas).
Tío, en Twitter he visto que te gustaría currar con Gloo. ¿Alguna vez te ha respondido?
Mira, generalmente no me gusta mandar DM’s fríos a la gente para intentar hacer música con ellos. No me siento bien, además ya veo mi música reconocida con la gente que yo trabajo. Aun así, a la única persona que le daría la brasa y con la que me gustaría hacer cosas es con Gloosito, más que nada porque realmente creo que tengo beats que a él le irían muy guay. Antes hablábamos de cosas que me vuelven loco y, la wave esta de detroit me ha encantado desde que la descubrí. Además, hago muchos beats de detroit a los que no le doy salida, entonces creo que a la única persona a la que no me importaría darle la brasa es a Gloosito.
Ya que hablas de la new wave y tal, el movimiento de los chavales de Disobey y tal, ¿qué te parece?
Tengo opiniones mixtas. Me parece que los chavales lo hacen muy guay y que han montado una movida que llama la atención a la gente, eso es innegable. El problema es que hay gente diciendo que vuelve 2014 y que este sonido es lo que va a pegar ahora. Sinceramente, la gente no sé si se acuerda, pero la P.A.W.N. Gang lleva haciendo esos desde hace mucho tiempo. Incluso en Boticarios temas tipo Chicago y tal. Yo la verdad no se si todo el mundo va a querer hacer ese sonido 10 años después. Está gracioso y muy guay, pero me extrañaría que la gente se pusiera a hacer ese sonido ahora. Aun así, todo el respeto. Me gusta el sonido que hace esta peña. Pero que la gente no se equivoque, hay muchos artistas que han hecho temas de este rollo, lo que pasa es que esta gente lo ha hecho bien y han conseguido que la gente atienda a lo que hacen. De hecho, tengo un disco con Chicoes3 cuando firmaba como Sportman y en ese disco había temas con sonido muy Chicago.
Bueno, Chicoes3 firmaba como Sportman y, si no me equivoco, tu firmabas como Keith Dramn. ¿A qué se debe ese nombre?
Ese nombre nunca me gustó. Era un anagrama de Mad Thinker, un villano de Marvel. Me hacía gracia tanto Marvel como el cambiar las palabras y me puse ese nombre. Aun así, a lo largo de los años dejó de gustarme, lo que pasa es que empecé a hacer cosas con Natural Spittaz, la gente me conocía y me daba pereza cambiarlo. En 2014, empecé a hacer beats de trap y, como había muerto Robin Williams, decidí, con ayuda de un colega, cambiarme el nombre a Alan Parrish, el nombre del protagonista de Jumanji. Pensé al principio en hacer como dos vertientes con dos sonidos distintos, pero como el anterior nombre no me gustaba, al final me quedé con el nombre de Allan Parrish.
Buscando en SoundCloud “Allan Parrish”, encontré dos cuentas: una con todo junto y la otra, la que usas ahora, con el nombre separado.
Sí, tengo dos (risas). No sabía volver a mi cuenta anterior porque no sé con qué correo la tengo registrada. Me quería hacer un SounCloud para publicar beats que no están usados y dije “uf, paso de buscar la otra”, entonces me cree una nueva (risas).
Te has marcado un Tyler, the Creator en toda regla (risas).
Totalmente, pero es básicamente porque soy un desastre (risas).
Bueno, he visto que has estudiado “teleco”. ¿Te ha ayudado en algo la carrera?
En cuanto a producción no, pero si me ha ayudado a tener independencia económica para poder hacer música y no tener que hacer música por ganar dinero, que para mí eso siempre ha sido importante. Creo que la carrera me ha ayudado a tener un trabajo que me permite poner dinero para hacer proyectos musicales y, además, poder hacer música sin estar preocupado en si funciona o no. Lo que se de producción lo aprendí por mi cuenta.
En cuanto a la independencia económica, ¿sientes que hacer música hoy en día es más barato y accesible?
Más que nunca. Te compras una Focusrite, un micrófono y un portátil medio decente y con eso puedes hasta ganar un Grammy si tienes buenas ideas. La música nunca ha sido tan accesible al público. Que también te digo, tiene su parte buena y su parte mala. Hace años el tener que conseguir un estudio, equipo y alguien que controlara de software de audio era muy difícil. Ahora está todo regalado.
Al ser más fácil, quiero entender que es más exigente el mercado, sobre todo el público. No sé si tú lo ves así.
No sé si directamente, pero indirectamente desde luego. Creo que, desde la perspectiva del que escucha música, hay tantas cosas que al final saturas mucho antes y, si tú escuchas música de continuo y realmente te preocupa escuchar cosas diferentes y demás, como que ya estamos muy cansados de escuchar las mismas cosas y te vuelves un poco más selectivo. El hecho de que la música sea más accesible y fácil de hacer nos ha hecho un poco más reacios a muchas cosas y más selectivos.
Ya que hablas de música fácil y accesible, ¿crees que esto afecta a la sociedad y los ritmos de consumo de música?
Creo que se consume todo mucho más rápido y que eso hace que las cosas pasen mucho más rápidas. Aun así, no creo que lo que tú hagas no pueda trascender de la misma manera que cuando la música no era tan accesible. Simplemente creo que el mensaje está mucho más difuminado ahora. Es más difícil retener la atención de la gente por la cantidad de oferta que hay, pero al final como hay tanta gente escuchando música, creo que esas dos cosas se compensan.
¿Tú crees que, al haber tanta música, el trabajo de los vocalistas queda más reconocido que el de los productores?
Sí, pero creo que no depende de las circunstancias, depende más del rol que quiera asumir cada uno. Yo creo que ahí influye un poco el cómo actúas tú. Como productor te puedes desentender de muchas movidas, hacer beats para la gente y olvidarte, que te dará una posición más secundaria. Si en cambio quieres asumir un rol más importante y demostrar que puedes estar a la altura de importancia de la persona que canta, puedes hacer muchas cosas. Por ejemplo, puedes hacer discos de productor con concepto. Para mí creo que es importante que, si quieres tener ese tipo de papel, demostrando que no solo apuntas temas un papel y ya, que quieres aportar algo y quieres que sea coherente, te puedes implicar en más cosas aparte de hacer beats, como en el arte o los visuales, de tal manera que la gente las asocie a tu figura cuando escuche la música que tú produces. Por ejemplo, creo que $kyhook es un tío que ahí lo ha hecho muy bien.
«Si los beatmakers queremos que se nos considere tan importante como los cantantes, tenemos que esforzarnos más»
Allan Parrish sobre los productores y el protagonismo de los mismos.
Fotografía por @andrea_savall
Cambiando de tema, te he visto hablar por Twitter acerca de los reaccionadores. Estoy bastante de acuerdo con bastantes cosas de las que dices, pero ¿qué es lo que te chirría de ellos?
A ver, a mí lo que me chirría del tema reacciones es que creo que hay gente que sabe hacer una review en directo, que es en lo que consiste una reacción, y realmente son sinceros sobre lo que escuchan y cuál es su opinión. Por ejemplo, Topu me parece un tío bastante honesto y, de hecho, me vi su review de “El Periplo” y dijo algo como “este sonido no me gusta tanto”, fue sincero. Me pareció honesto y me acuerdo de que le comenté “respect porque estás siendo honesto”. Además, está aportando algo. La gente ve tus reacciones porque quieren saber qué piensas sobre lo que estás escuchando. Entonces, mi problema es que creo que para que a un reaccionador le funcione, tiene que ser una cosa demasiado endulzada. La exageración de ciertas reacciones creo que hacen daño al artista y a la música. Al final la gente percibe la música de esa manera, haciendo que al final perciban la música de forma muy endulzada. Ves en Twitter que salen temas, la gente los escucha y es como “buah, que locura, madre mía”. Está muy polarizado y creo que las reacciones no ayudan a frenar esto. No creo que no haya que haber reacciones, pero deberían hacerse de forma honesta. Mira a Anthony Fantano, reacciona a discos de forma muy honesta.
Totalmente cierto. Además, el ejemplo de Fantano es muy claro. La gente suele echársele encima por decir lo que piensa acerca de determinada música.
También hay una cosa que no me gusta nada y es que la gente siempre se esconde detrás del “yo no soy periodista” o “yo no soy musicólogo” como escudo para que las opiniones que se expresen no se tengan en cuenta. Si tú estás opinando sobre música y sueltas conceptos o “facts” que luego no son verdad o que no te has informado bien, pues me parece que también haces daño. No puedes decir cualquier burrada sobre cualquier tema y luego decir “bueno, es que a mí no me vengas a pedir explicaciones que de eso no sé”. Pues entonces no divulgues sobre música, que eso es otra cosa que tampoco me gusta. Yo no necesito que la gente sepa en qué hospital nació J. Dilla, pero tampoco propaguemos la ignorancia y, sobre todo, no nos hagamos cargo de nuestra ignorancia. Si tú has dicho una cosa y no está bien, reconócelo. Eres un reaccionador y estás ganando dinero de opinar sobre música, por lo tanto, tienes una responsabilidad.
Muy cierto. Creo que esto conlleva un problema de “borreguismo”, al final la gente sigue este tipo de opiniones.
Sí, total. Las opiniones que tienes y compartes por Internet influyen a la gente. Hay que tener cuidado con las cosas que se dicen porque tienen un impacto. Que tu opinión no tenga un fundamento, no tengas ni idea y acabes diciendo tonterías no va a hacer que todo el mundo se desinforme, pero tu huella no está siendo positiva. No estás aportando. Si vas a opinar sobre música, trata las cosas con respeto, distancia y mesura. No te plantes delante de una cámara y sobrerreacciones. Somos bastantes los que opinamos esto.
Cambiando de tema, quería rescatar la polémica que hubo cuando Ye y James Blake se quejaban de Spotify, una plataforma que ayuda poco a los artistas. ¿Tú estás de acuerdo?
A ver, yo estoy de acuerdo. Lo que paga Spotify por stream me parece injusto. La cosa es que, si Spotify ha montado un imperio del streming, el mérito es suyo y al final ellos pueden hacer lo que quieran. No sé si alguien va a cambiar eso. Yo quería pensar que Ye y James Blake iban a cambiarlo, pero visto lo que hizo este último siento que eso no va a ser lo que cambie el modelo de forma de consumo. Es un tema muy complejo, yo no sé qué se puede hacer para cambiarlo. Lo único que a veces se pasa por mi cabeza es que, en algún momento, la gente compre a mansalva el formato físico y volvamos a eso.
Yo estuve pensando el otro día y ¿no crees que SoundCloud podría ser una buena plataforma para los artistas?
No tengo ni idea de cómo monetiza SoundCloud, lo único que sé es que tiene menos restricciones. Además, no sé si la gente consumirá mucho SoundCloud.
De vez en cuando me meto a escuchar temas filtrados y cosas del estilo.
Yo creo que la época de SoundCloud ya fue, dudo mucho que vuelva. Tampoco tengo ni idea de qué modelo será el siguiente. Es más, no sé qué quiero que pase.
Y por último, ¿qué es para ti la música?
Ostia, es una pregunta muy amplia. Bueno, primero de todo es un producto de entretenimiento, no nos equivoquemos porque debe tener esa parte; y luego, es un arte. Seguramente dirás “es una obviedad”, pero muchas veces eso la gente lo olvida. Al ser un arte, todo lo que está relacionado con tu música ha de tener sentido y esa premisa en mente.