Llevo desde los dieciocho años escuchando la música de El Virtual, y tenerle delante por primera vez impone. Es una figura con mucha presencia y con cara de que le va a tocar un control “aleatorio” cada vez que se suba a un avión. Pero lo cierto es que cuando nos sentamos en el sofá es como si estuviese con un amigo de toda la vida. Aquella mañana en la que le entrevisté no tardé en darme cuenta de que delante no tenía a El Virtual que lleva más de tres años sonando en mis cascos, sino que estaba teniendo la oportunidad de conocer a Guille. En media hora de conversación hablamos de sus inspiraciones, inseguridades y sueños. He visto de primera mano el viaje de redención del virtual, y vuelvo para contároslo con pelos y señales. Dentro entrevista.
P: ¡Buenas Virtual! Primero que nada, ¿Qué tal va todo?
R: Pues muy bien, gracias a Dios con trabajo todo el rato, sin parar de hacer música como a mí me gusta, que no puedo parar, y mientras eso esté así todo está bien.
Vuelta a Empezar es el primer proyecto que lanzas este año. ¿Cómo lo presentas al mundo y qué es lo que lo diferencia de tu trabajo previo?
Pues lo que lo diferencia es que ha habido un salto de madurez. El proceso personal que he vivido con este disco no lo he vivido con otros porque yo vinculo mucho mi trayectoria con mi proyecto. Esta vez ha sido más serio, más pies en la tierra y choques de realidad y menos pajaritos en la cabeza.
«La música ha ido poco a poco sustituyendo a la droga»
El primer tema es la secuela espiritual de Oda a la obsesión. ¿Dónde queda para ti la frontera entre reciclaje y homenaje?
Uf, curiosa pregunta, me mola. No lo veo un reciclaje para nada y tampoco un homenaje. En mi paranoia mental yo no tenía en mente hacer una nueva “oda”, simplemente llegó. Ahí me autorreferencio y tiene más de homenaje, pero lo que te digo, es una paranoia y ya está.
Te lo pregunto porque tú acostumbras mucho a hacer secuelas de tus propios temas, ahí tenemos de ejemplo El 3 pt. II: El Camino.
Para eso siempre he bebido mucho de Los Simpsons, que en un capítulo referencian a otro aunque no tenga nada que ver y sean completamente inconexos. Sobre todo con la saga de El 3 me gusta mucho hacerlo.
¿No te preocupa que afecte la cantidad de trabajo que lanzas a la calidad del mismo?
No me preocupa, la verdad. Yo estoy acostumbrado a hacer música así desde que empecé a hacerla. Hacer un tema al día, dos temas al día, cinco temas a la semana… Como desde el minuto uno he hecho eso siento que el nivel de calidad siempre va a más porque voy puliendo mis métodos, es calidad y cantidad.
¿Y no te agobian los ritmos de producción que establece la industria?
Sí me agobia porque me limita. Es cierto que ya estoy metido en el circuito de la industria pero yo no me siento así, me siento como el día uno. Intento no ponerme encima tantos agobios, cumplo las cosas porque esto es un trabajo pero sigo haciendo música aunque no la saque, la voy dosificando. El año que viene sacaré lo del año pasado (risas).
«El Virtual es Guillermo pero sin trabas en la cabeza, el Guillermo sano»
Eso te iba a preguntar, ¿Cuánto tiempo llevas haciendo este disco?
Ha sido poco, normalmente suelo tardar par de años y este ha sido uno o menos. Hacerlo lo hago en una semana, luego ya tiene los procesos de mezcla y demás que es lo que más lo retrasa.
Van a hacer tres años de El Disco Que No Quería Dedicarte y alguna vez te he escuchado decir que has tenido un relación tortuosa con ese proyecto. ¿En qué punto está tu relación con ese disco actualmente?
Considero que es de lo mejor que he hecho y a nivel repercusión y números eso se ve representado. Hace poco me lo volví a escuchar por primera vez desde que lo saqué. Con el resto de mi música si la escucho con más frecuencia, pero este disco no, porque duele. Con el tiempo se asentó todo eso y lo puedo ver como un espectador sin recordar los traumas. Hice la gira en 2021 y nunca más lo he vuelto a cantar, pero a veces pienso en hacerlo. He conseguido separar esa obra de mí.
En tus proyectos más recientes noto una vibra más alegre. ¿Ves más complicado encontrar inspiración en la felicidad que en la tristeza?
Antes si me pasaba, pero ahora si estoy triste no puedo escribir, necesito estar equilibrado. La inspiración la cojo de donde sea pero necesito ese equilibrio, y por eso creo que he logrado tener esa madurez. Ahora consigo calmar mis aguas y no dejarme llevar por las emociones. Antes si no estaba hecho una mierda no podía crear y eso tampoco es sano.
«Toda mi lista de colaboraciones soñadas prácticamente está hecha»
Te he visto meter siempre muchas referencias a cine y videojuegos. ¿Logras sacar tiempo para estas cosas?
Precisamente con los videojuegos he conseguido encontrar hueco. Me he obligado a encontrar hueco para el ocio porque desde que abro los ojos estoy pensando en trabajo. Cuando encontraba huecos vacíos en mi vida normalmente me quedaba dormido, pero sin embargo los videojuegos ya los tengo casi como algo terapéutico, y me parece un método de evasión sano, sin abusar en exceso. Saco tiempo, me mola un montonazo y me inspira un montón también. Ahora me estoy jugando por ejemplo el Baldur’s Gate 3.
Viendo el aire punk que siempre te ha caracterizado te quería preguntar: ¿es algo que haces de manera intencional o te sale solo?
Sale solo bro. Pocas cosas puedo hacer de forma intencional porque soy muy inseguro a la hora de crear un personaje. Nunca he podido creerme nada de lo que hago y he tenido mucho síndrome del impostor, son cosas malas pero también me ha ayudado a mantener el ego a raya. Hace no mucho en una de las últimas sesiones que tuve con mi psicóloga me preguntó si yo distinguía entre Guillermo y El Virtual, y yo no los distingo. En cualquier caso El Virtual es Guillermo pero sin trabas en la cabeza, el Guillermo sano. Voy deambulando en eso pero manteniéndome como yo mismo todo el rato.
Este rollo más despreocupado y punk lo llevan muchos artistas, ¿tú crees que se lo puede permitir todo el mundo o te lo crees más en unos que en otros?
Creo que hay que tener la actitud para poder hacerlo sin quedar de tonto e irrespetuoso. La gente tiene que entender que eres así. Si no estás impostando nada adelante, me parece que hay que jugar. Estaba justo pensando en Cecilo G.
A mí me encantó el videoclip pero porque es muy Cecilo (risas).
«El proceso personal que he vivido con este disco no lo he vivido con otros»
Además eso fue increíble, el me propuso hacer el vídeo a distancia. Pasaron los días y el tema iba a salir esa noche y yo ya dije “nada, este ha pasado”, y cuando quedaban diez minutos para que saliese me habla y me dice: “bro, he conseguido el kimono” (risas). Me mandó los vídeos y me pareció increíble así que me puse a grabar mis vídeos. Admiro esa despreocupación y ese amor al arte, que aun teniendo una vida caótica sacas tiempo para buscarte una escenografía y ahí es donde ganas, porque demuestras el amor que le tienes al arte.
Cambiando de tema, ¿en qué punto estás ahora en tu relación con las drogas?
El punto de inflexión fue cuando saqué El Disco Que No Quería Dedicarte. Siempre ha habido música y droga en mi vida, pero la música ha ido poco a poco sustituyendo a la droga. Desde ahí quedó muy atrás pese a no eliminarse, y creo que mi relación actual es muy madura. Teniendo en mente que todo en exceso es malo considero que todo va guay. A mí las drogas me gustan, es un mundo que me fascina. Hablando claro, yo fumo porros a diario, esporádicamente algo de jarabe y si eso de fiesta algo de M, pero de ahí no paso. Tampoco es que me hinche de fumar. Mi vida no gira en torno a eso y tampoco me quita tiempo. Está la parte buena de que me inspira y me da creatividad pero también la parte mala de que me da más ansiedad de la cuenta.
Volviendo a las colabos, ¿hay alguna reciente que hayas disfrutado especialmente?
Lo estuve hablando con mi colega el Yerman el otro día. Toda mi lista de colaboraciones soñadas prácticamente está hecha. Papi Trujillo, Cecilio G, Erik Urano… La de Erik Urano me hace mucha ilusión y hasta ahora era secreta pero ya saldrá, y lo mismo a nivel producción con Gese Da O.
Como conclusión, ¿esta “Vuelta a Empezar” que pone título al disco se refiere a un reinicio de tu faceta de artista con los oyentes o es algo más interno contigo mismo?
Es todo tío, me vinculo directamente con mi obra y me considero una avanzadilla emocional de la misma. Yo voy a vivir las cosas y vuelvo para contarlas y que la gente sepa lo que hay allí. Lo bonito es que le puedes dar el enfoque que tu quieras. Luego mágicamente la gente suele pasar por etapas similares, y cuando la gente me dice “bro estás diciendo lo que pienso” caigo en que realmente todo es muy cíclico.